Si notas que, de un periodo a otro, tu recibo de luz ha tenido un aumento considerable, te recomendamos que sigas los siguientes puntos para corroborarlo.
Consulta el consumo de tu recibo de luz
Lo primero que tienes que hacer es consultar tu recibo de luz para saber cuál ha sido el consumo de kWh (kilowatts por hora). Te recomendamos que hagas una comparación entre al menos dos periodos.
Para ello, busca un recibo de luz actual, y ubica el cuadro de consumo de energía por kWh ubicado en el frente de tu factura de luz. Si restas la lectura actual contra la anterior, obtendrás los kWh consumidos por bimestre.
Revisa tu tarifa de luz
Dentro del esquema de precios de la CFE, existe la tarifa Doméstica de Alto Consumo (DAC). Esta se aplica a los servicios domésticos que superan el límite mensual de consumo establecido para hogares. Ten en cuenta que la DAC no posee subsidio gubernamental, por lo cual es seguro que verás reflejado un aumento en tu recibo de luz.
Disminuye el consumo al finalizar el verano
Si bien la CFE dispone de un sistema tarifario especial para aquellas zonas del país que sufren de calor extremo durante el verano, tienes que tener en cuenta que dicho “subsidio” finaliza en el bimestre de septiembre a octubre.
Si resides en una de estas localidades, recomendamos bajar el consumo al finalizar el verano para no ver aumentos en el recibo de luz.
Ahorra energía en tu hogar
Debido a la pandemia, los hogares han sufrido una gran modificación en sus costumbres. A más tiempo dentro del hogar, mayor consumo de electricidad. Es por eso que, es importante cuidar más que nunca el uso de la electricidad para evitar subas en la tarifa de luz.
Te invitamos a que pongas en práctica estas recomendaciones, para que puedas ahorrar energía en tu hogar.
